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En su día, la realidad obligaba a los usuarios de PC, especialmente a los jugadores, a comprar dispositivos de audio externos, a menudo costosos. Con frecuencia, los monitores carecían de altavoces y, cuando los tenían, la calidad del sonido dejaba mucho que desear. En otras palabras, no sonaban nada bien. El sonido era plano y débil, por lo que se necesitaban altavoces externos. No obstante, igual que las placas base evolucionaron hasta el punto de que la mayoría de jugadores dejaron de comprar tarjetas de sonido dedicadas, los monitores también mejoraron en el audio. Muchas pantallas actuales destinadas a los juegos y al entretenimiento incluyen impresionantes diseños de altavoces duales con un subwoofer independiente; lo que se conoce como audio 2.1. Ofrecen un gran estéreo con graves profundos, por lo que no hace falta recurrir a unos altavoces externos, a menos que realmente quieras hacerlo.
La brecha entre monitores y televisores sigue estrechándose. Mientras que en el pasado los televisores enfatizaban tanto la imagen como el sonido y los monitores se centraban solo en lo visual, actualmente estos últimos sustituyen básicamente a los televisores a la hora de proporcionar una experiencia audiovisual completa. El auge de los monitores centrados en el entretenimiento y en los juegos ha fomentado especialmente el desarrollo conjunto de tecnologías de visualización y sonido. Los juegos exigen el mayor rendimiento gráfico, pero también requieren un sonido preciso e impactante. Por lo tanto, los monitores para juegos a menudo cuentan con un audio impresionante capaz de competir fácilmente con el que ofrecen los televisores. Análogamente, como cada vez hay más gente que usa monitores para ver películas y programas de televisión a través de servicios de streaming, la necesidad de un buen audio integrado se ha vuelto más obvia..
Así pues, la respuesta a la pregunta planteada en el título es clara: los monitores modernos para juegos (y entretenimiento) sin duda ofrecen un buen sonido sin la ayuda de dispositivos externos. Además de ahorrar dinero en unos altavoces innecesarios, el audio integrado también contribuye a mantener la mesa despejada al reducir la cantidad de cables y dispositivos. Los monitores de juegos y entretenimiento de hoy en día proporcionan una plataforma completa todo en uno amparada por la gran cantidad de conexiones que se adaptan a tu PC, consolas, dispositivos para streaming, etc.
A medida que los videojuegos han ido convirtiéndose en la principal forma de entretenimiento del planeta, inevitablemente han ido creciendo también en sofisticación. Si bien puede que los gráficos constituyan la faceta más relevante de los juegos, el sonido juega también un papel importante en todos los géneros. Los juegos de acción requieren la profunda conciencia situacional y direccional que proporcionan las pistas auditivas. Los títulos narrativos tienen impresionantes bandas sonoras para transmitir emociones y potenciar las historias. Los grandes juegos de estrategia utilizan innumerables efectos de sonido para que los jugadores sepan lo que está sucediendo. Con un sonido deficiente, no solo pierdes en cuanto a la experiencia, sino también en la capacidad de disfrutar de los juegos. Además, los jugadores profesionales de partidas multijugador te dirán que sin un buen sonido es poco probable que ganes.
Los monitores de BenQ como el EX2780Q y el EW3280U cuentan con un audio inmersivo 2.1 que hace justicia al gran esfuerzo que los equipos de desarrollo de sonido realizan para cada juego y, por supuesto, para las películas y los programas de televisión. También en estos últimos, un buen sonido marca la diferencia. Si ves una película o un programa de TV en un monitor con malos altavoces es posible que ni siquiera entiendas lo que dicen los personajes y, mucho menos, que captes los matices de la banda sonora. Si disfrutas del mismo contenido en un monitor con un sonido potente y optimizado, verás cobrar vida nuevas facetas de la misma obra.
Además, huelga decir que todos los monitores modernos para juegos y entretenimiento cuentan con salidas de auriculares para que puedas ser considerado con los demás. No hace falta molestar a nadie con el sonido a todo volumen: basta con que te pongas tus auriculares favoritos cuando sea necesario.
Ya hemos mencionado anteriormente que sigue existiendo la posibilidad de añadir sistemas de audio externos a los monitores. Sin duda puedes comprar una barra de sonido o conectar el monitor a un amplificador. Sin embargo, hay tres factores que desaconsejan tal elección. Comprar un equipo de audio específico te costará dinero adicional y, además, aumentará tu factura de la luz, ya que esos altavoces externos o esa barra de sonido requieren su propia alimentación. A eso se suma todo el cableado y las conexiones adicionales, que siempre acaban molestando: te recomendamos encarecidamente que reduzcas las conexiones a las imprescindibles para los dispositivos de origen, como el PC o las consolas, en lugar de complicarlas con un sonido externo totalmente opcional.
Recuerda que no todos los monitores son iguales en lo que se refiere al sonido. Muchos fabricantes usan altavoces básicos y subwoofers que ni suenan muy bien ni duran mucho. En BenQ, hemos desarrollado la tecnología de audio treVolo gracias a un equipo que agrupa a algunos de los mejores ingenieros de sonido del mundo. En cuanto al hardware, cuentan con imanes de neodimio, membranas duraderas y una fabricación robusta.
Hay que estar muy agradecidos a la tecnología que tenemos. Mientras que antiguamente hubiera sido casi imposible obtener un buen sonido de un monitor o hubiera requerido una pantalla muy gruesa y voluminosa, ahora es fácil. Los monitores para juegos actuales ofrecen un sonido espectacular con diseños finos. En la práctica, no hay necesidad de comprar altavoces externos, ya que no conseguirás realmente nada a cambio del dinero que te gastas en ellos. Si quieres un verdadero sonido de alta fidelidad o que llene la estancia, entonces, por supuesto, busca un audio a lo grande, pero en tal caso no deberías estar pensando en el típico monitor de 27 o 32 pulgadas. Encajarían mejor lo que llamamos pantallas de gran formato (de 40 pulgadas o más). Estas combinan la velocidad de los monitores con un gran sonido del nivel de un televisor y pueden inundar toda una habitación con un audio maravilloso. De no ser así, hazte con un monitor, conecta tu PC o consola a través de HDMI y empieza a disfrutar de un estupendo sonido.
