Estudio en profundidad de la estética de los videojuegos: realizamos una investigación exhaustiva sobre los juegos más populares de los últimos cinco años. Analizando gameplays, libros de arte y entrevistas a desarrolladores, capturamos la esencia narrativa y visual de cada título. Estas ideas fueron la base de la Game Art Color Database.
Colaboración con expertos en calibración: estos hallazgos se transformaron en diversos ajustes de color colaborando con expertos en color e ingenieros. Por ejemplo, en Like a Dragon: Infinite Wealth, ajustar el contraste y la temperatura de color mejora la visibilidad en escenas oscuras, aunque puede reducir levemente el toque artístico tan característico de estilo cómic del juego.
Participación de los jugadores en la prueba: se realizaron análisis cuantitativos y cualitativos, como encuestas online y pruebas a ciegas, para garantizar que las opciones de color seleccionadas realmente conectan con las preferencias de los gamers.