Deje de jugar inmediatamente si experimenta molestias como fatiga ocular, mareos o náuseas. Algunas personas son sensibles a las luces intermitentes o parpadeantes o a las formas y patrones geométricos, y pueden tener una afección no diagnosticada previamente que les predispone a las crisis epilépticas al jugar a videojuegos. La mayoría de los síntomas deberían desaparecer o mitigarse cuando los usuarios se acostumbran a jugar, así como al diseño curvo del monitor.
Por lo general, le sugerimos que evite el uso prolongado de su monitor para juegos y que realice descansos de 15 minutos durante cada hora de juego. Sin embargo, al jugar a juegos estereoscópicos en 3D o ver vídeo en 3D, la duración y la frecuencia de los descansos necesarios pueden variar de una persona a otra. Realice descansos que sean lo suficientemente largos como para permitir que cualquier sensación de incomodidad desaparezca. Si los síntomas de malestar persisten, consulte a su médico.